“Vivimos en el momento más peligroso de la posguerra. La gente siente más que estamos en peligro”. Así se muestra Josep Borrell. No es para menos. Es el alto representante de Política Exterior y Seguridad de una Unión Europea en crisis permanente, con dos guerras -la de Rusia contra Ucrania y la de Israel en Gaza-, y múltiples frentes abiertos, diplomáticos, comerciales y estratégicos. Un club comunitario, con 450 millones de habitantes, que desespera de su propia debilidad. La acción exterior, en el centro de la diplomacia europea (La 2, este sunmingo a las 22.00 h), un documento escrito y dirigido por el premiado Albert Solé, sigue los pasos de Borrell, 77 años, metódico e incansable, durante tres meses en misiones en Ucrania, China, Ghana y Cercano Oriente y retrata las negociaciones, los equilibrios políticos europeos en los pasillos y salones de Bruselas.
“Europa, los europeos, no estamos preparados para afrontar el mundo tal como es, un mundo duro, agresivo, lleno de desafíos”, afirma Borrell en el documental. “Necesitamos estar preparados para circunstancias más difíciles de las que estamos acostumbrados. Construyamos la paz en nuestro interior; en algo único y excepcional en nuestra historia, y creemos que esa paz fue la forma normal en que ocurrieron las cosas, no sólo en Europa sino en el mundo. Y sabemos la verdad que la tenemos”, vemos al jefe de la diplomacia europea en el documental, un impulsivo proyecto de Montserrat García, asesora especial del Alto Representante.
Octubre de 2023. Odesa. Borrell y un equipo de diplomáticos que le acompañan desde EL PAÍS visitan la perla del Mar Negro, la ciudad portuaria estratégica para el país invadido por Rusia en febrero de 2022 y que se encuentra bajo constantes ataques de misiles y drones. Es un punto especialmente candente, explica Borja Lasheras, asesor de Borrell para Ucrania. La tripulación, de tamaño reducido, entra por la puerta, una gran infraestructura que antes de la guerra a gran escala lanzada por Vladímir Putin, era una de las principales de la zona y de donde subían toneladas de trigo. Unos minutos después de la salida de Borrell, los diplomáticos, acompañados por un grupo de militares ucranianos, abandonaron el zumbido. Uno de estos encabalgamientos iraníes utilizados en Rusia contra la infraestructura civil ucraniana se encuentra cerca del puerto. El Kremlin, al que los equipos de seguridad de los líderes europeos informan sobre el sistema de sus viajes y visitas, se hace notar.
“No nos intimidan sus misiles y drones. Nuestra determinación de ayudar a Ucrania continúa intacta”, afirma Borrell poco después de un mensaje dirigido a la Rusia de Putin. Es la tercera visita a Ucrania de Borrell, ingeniero aeronáutico y economista, que hizo carrera política en España, donde llegó a ser ministro de Asuntos Exteriores y que hoy es la voz española más fuerte en la UE. Una voz que alerta constantemente al doble radar sobre la guerra de Rusia contra Ucrania y la guerra de Israel en Gaza, en respuesta a los ataques de Hamás del 7 de octubre.
Los sangrientos atacan el pilar en China, en plena misión en el gigante asiático, socio, rival y competidor de la UE, y con quienes tienen diversas disputas comerciales abiertas. Borrell inició así un frenesí de llamadas a los países árabes, captadas por las cámaras de Solé. “Hemos fracasado estrepitosamente a la hora de hacer de la solución de dos Estados algo más que un eslogan que se repite en las reuniones políticas”, le dice el teléfono a uno de ellos.
Activa el Comité de Crisis Europeo para preparar posibles evacuaciones en la zona y el Centro de Crisis de la UE en Bruselas, puesto en marcha por Francisco Fontán, jefe del Gabinete de Borrell, que analiza los niveles de alerta y monitoriza todo lo que por segundo se propaga desde los focos abiertos en las zonas más calientes. poder tomar una radiografía de la situación, gracias a imágenes de satélite clasificadas.
El candente cuadro geopolítico de los alcistas de East Next. E Israel se lanza al asedio de Gaza, cortando el acceso al agua, a la electricidad y a los alimentos en la Franja, protegida por los bombarderos. Borrell es el primer líder europeo que afirma ante el Gobierno de Benjamín Netanyahu que Israel tiene derecho a defenderse, pero respetando el derecho internacional. Y esto es un asedio en Ucrania y también en Gaza.
“La postura de Borrell es coherente. Esto es lo mismo que tenemos en Ucrania”, afirma el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en el documental, que también da voz, entre otros, a la primera ministra de Estonia, Kaja Kallas, que sustituirá a Borrell al frente de la diplomacia europea en la próxima legislatura.
Acción exterior Sigue a Borrell en su viaje más delicado: Israel, de donde proviene la acusación de ser “propalestino”. Tras visitar varios kibutzim adscritos al 7-O de Hamás, y en plena ofensiva israelí sobre Franja, le dijo a Israel Katz, ministro de Asuntos Exteriores: “Debo decirle que no debe consumir rabia. Esto es lo que un amigo de Israel puede decirles.” Luego visitarás Ramala. Se trata del primer viaje de un líder europeo al territorio palestino desde el inicio de la guerra de Israel en Gaza. Ahí se refieren, de nuevo, al doble afeitado de la UE, que ni siquiera tiene una posición común y unitaria sobre el conflicto; las cicatrices de la historia pasan factura.
La crisis geopolítica avanza a un ritmo frenético. “Europa sólo reacciona cuando hay una crisis, todo depende de la capacidad de respuesta”, afirma Borrell. Y también: “Somos mucho más reactivos y por tanto sabremos lo que el mundo nos empuja a ser”.
Puedes seguir EL PAÍS Televisión en X o regístrate aquí para recibir nuestro boletín semanal.