Londres reacciona ante la presencia del barco ruso en sus aguas

El Ministro de Defensa del Reino Unido criticó hace poco la entrada de un navío ruso, conocido como Yantar, en aguas próximas a las costas del Reino Unido en el Canal de la Mancha. De acuerdo con las fuentes oficiales, este barco dedicado a la investigación oceánica está asociado al Ministerio de Defensa de Rusia y posee tecnología moderna para explorar el lecho marino. Esto incluye drones que pueden identificar infraestructura submarina crucial como cables y tuberías, vitales para la provisión de energía y la transferencia de datos de internet hacia y desde el Reino Unido.

Identificación y reacción inmediata

El lunes de la semana pasada, la Royal Navy localizó al Yantar a unos 70 kilómetros de las costas del Reino Unido, lo que provocó una reacción inmediata que consistió en el envío de dos buques de guerra, el HMS Somerset y el HMS Tyne. Asimismo, un submarino británico ascendió en el Canal de la Mancha como acción disuasoria, evidenciando que los movimientos del navío ruso estaban bajo constante vigilancia.

El ministro de Defensa declaró: “Estamos supervisando cada uno de sus desplazamientos. No vacilaremos en tomar acciones firmes para salvaguardar nuestra infraestructura vital”. La Royal Navy ajustó sus protocolos de intervención para permitir que los buques británicos se aproximen más al Yantar, garantizando así una vigilancia constante y directa.

Infraestructura bajo el foco submarino

El Yantar no es un navío común. Gracias a su habilidad para investigar el fondo del mar, representa una potencial amenaza para la infraestructura submarina del Reino Unido, la cual abarca cables y tuberías esenciales para la economía y la seguridad nacional. Este tipo de infraestructura es crucial para transportar aproximadamente el 95% del tráfico de internet y tiene un rol importante en el suministro de energía a las islas británicas.

Aunque el barco ruso se ajustó a las regulaciones internacionales de navegación, no es la primera ocasión en que el Yantar ha sido visto en la región. El noviembre anterior, se le avistó navegando en áreas próximas a la infraestructura submarina del Reino Unido, lo que ha impulsado al Gobierno a incrementar de manera considerable la vigilancia en estas áreas estratégicas.

Fortalecimiento de la seguridad

Como reacción al incidente, el Reino Unido ha fortalecido su vigilancia marina y aérea, trabajando de manera cercana con la OTAN. Las patrullas de la Royal Air Force se unirán a las operaciones en marcha para asegurar que la infraestructura subacuática esté resguardada de cualquier interferencia externa. Este refuerzo en la seguridad no solo responde al incidente presente, sino también a eventos recientes en los que cables submarinos entre Estonia y Finlandia fueron dañados, supuestamente por actividades rusas.

En respuesta al incidente, el Reino Unido ha intensificado su vigilancia marítima y aérea, en estrecha colaboración con la OTAN. Patrullas de la Royal Air Force se sumarán a las operaciones en curso para garantizar que la infraestructura submarina esté protegida de cualquier interferencia externa. Este aumento en la seguridad responde no solo al incidente actual, sino también a eventos recientes en los que cables submarinos entre Estonia y Finlandia fueron dañados, supuestamente debido a actividades rusas.

El suceso ha generado respuestas en el ámbito político. Miembros de la oposición han manifestado su total respaldo al Gobierno en su gestión de la situación, subrayando la importancia de la transparencia y de tener una estrategia definida para enfrentar el aumento de la actividad naval rusa. En este contexto, el Reino Unido ha reafirmado su compromiso con la defensa de su territorio y la salvaguardia de su infraestructura crítica, tanto a nivel nacional como en cooperación con sus aliados internacionales.

Contexto global y mensaje a Rusia

Escenario global y mensaje a Rusia

El episodio ocurre en un momento de creciente tensión entre Occidente y Rusia, especialmente en el ámbito marítimo. Desde incidentes en el mar Báltico hasta la vigilancia de infraestructuras clave, la presencia de buques rusos en áreas sensibles ha generado preocupación. El secretario de Defensa británico envió un mensaje claro: “Os estamos viendo, sabemos lo que estáis haciendo y no dudaremos en tomar una acción robusta”.

By Juan Antonio De los Palotes